¿Qué, llevas tanto rato ya en la cocina
que aborreces el acto mismo de la deglución? ¿Has chupeteado los langostinos del cóctel que
reservarás a tu cuñada? ¿Tu primo te ha rellenado lo bastante el
depósito de Licor 43 como para que calibres el grado de
idiotez que tendría el fruto de vuestros restregones? ¿No puedes
dejar de pinchar y cantar versiones castizas de La Gozadera?
Entonces la blogosfera está muerta
(...Calasparra me lo confirmó...), y yo tengo permiso para
perpetrar mi propia versión de un cuestionario que publica la
revista Elle (...Santoña me lo confirmó...) y que
Sara Carbonero le pasa al No Tan Inimaginable Presidente del Gobierno
Bertín Osborne (...Brazatortas me lo confirmó...)
(No me preguntes cómo ha llegado a mis
ociosas manos dicho cuestionario. Se titula, juiciosamente, Cuando
nadie nos ve...)
¿Cuál es tu lema?
“No pospongas la alegría”. Lo sabe
cualquiera que me tenga entre sus contactos de Whatsapp. Ni el tiempo
ni el hábito lo erosionan.
¿Qué te han enseñado los años?
A dejar de esperar.
Tu idea de la felicidad y tu gran
miedo son...
Mi idea de la felicidad es que me salgan
agujetas de risa en la barriga. No hacer cuentas de ausencias.
Acostarme cansada de campo. Mi gran miedo es llegar a tener una idea
fija de la felicidad.
¿Cuál es tu mayor pasión?
Comprobar que después de un día viene
otro. No, los libros. No, la gente. No, toda esa fábrica perfecta de
generosidad que es un árbol. Todo eso, amiguitos.
La banda sonora de tu vida es
¡Abultada y heterogénea! Pero si tengo
que elegir, a Nick Cave y un viento flojo moviendo las hojas de un álamo.
¿Qué te inspira?
Ay, tengo la mano larga y los ojos como esponjas.
Si fueras un animal, ¿cuál serías?
Un abejaruco.
(A continuación, dos preguntas a
propósito de canciones del último disco de Su Excelencia)
¿A qué te han acostumbrado a ti?
Al placer recíproco de la generosidad.
¿Con quién te irías tú a la Luna?
Los aviones me aterrorizan, así ya me lo
puede suplicar M. Fassbender, que yo... Y además, ¿la Luna, ese
erial sin croquetas ni hierbas?
Tu mayor extravagancia es...
Ponerme auriculares y la cara de
escuchar a Satie, pero por dentro bailar reguetón.
Un viaje pendiente
Sólo hay que revisar la pregunta de la
luna para saber que casi todos. Pero en caso de que me induzcan el
coma, Oceanía. Así, al bulto. Ya que me pongo...
La cualidad que prefieres en las
mujeres
Y en los hombres: la alegría. Quiero
creer que no hay cualidades intrínsecamente femeninas.
El don de la naturaleza que te
gustaría poseer es
El poder de renovación continua. La
exuberancia. La ecuanimidad.
¿Cuál es tu prioridad en la vida?
Respirar.(Me salto dos preguntas relacionadas con la prole de Su Excelencia. Y sigo)
¿Quién es tu mejor apoyo?
Los dedos gordos de mis pies. Los libros.
Y ya sabes.
¿Cuál consideras que es tu gran
logro?
Aprender a conducir me costó un capital.
Hacerle los mandados a mi madre sin ponerme roja. Dormir ocho horas
seguidas junto a otro ser humano.
¿Cómo te ves de aquí a diez años?
Despreocupada de mí misma.
Un sueño por cumplir.
Aquí los huevos toreros de Su Excelencia
declaran lo siguiente: “No he tenido los sueños, lo que quiero lo
consigo”. Mi sueño es desarrollar semejante aplomo.
¿Qué no harías por nada del mundo?
Ponerme medias blancas. Comer cabello de
ángel. Comprar amor con pena.
Si te perdieras, ¿dónde te
encontraríamos?
En las nubes. A aquel rincón de Cádiz voy a encontrarme.
¿Cuál es tu momento favorito del
día?
El despertar. Y después cuando llego del
trabajo y digo “hola, casa”. Y cuando el colchón
viscolástico nos abducen a mí y a mi libro.
¿Cómo te gustaría que te
definieran?
Con una sonrisa.
Cualquiera que lea esto y te conozca un poco, hablará siempre de ti con una sonrisa. Es inevitable. Un besazo navideño, guapa! :)
ResponderEliminarOtro para ti, que no sólo pasas por alto que te debo una carta desde el Paleolítico, sino que encima siempre encuentras algo bonito que decirme.
EliminarJejeje. Quieres decir que aprender a conducir te costó un capital "de esfuerzo", ¿no?.
ResponderEliminarMe encantaaaaaa!!!, besitos pri
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