Quizás me falten horas de
sueño, aunque anoche me metiera en la cama antes de las once.
Quizás
este sea uno de esos breves periodos en que mi cerebro me sabotea. Se
coloca él solito con su propia química nerviosa. Pone voces como si
fuera un ventrilocuo, y yo, su muñeco. Traza planes de huida.
Quizás estoy aparcando la
resolución de algunas cuestiones todavía más básicas que el acto
de la escritura.
Quizás debería cerrar los
ojos, sin apretarlos, y no volver a abrirlos hasta que mi proyecto
“La vida va a molar” estuviera medianamente apuntalado. Quizás
debería estar escribiendo el guión para una película de mi futuro.
Quizás el proyecto en el que merezca más la pena embarcarse sea el de mantener bien nutrido el sentido del humor.
Quizás a veces no presto
toda la atención que debiera al piloto rojo que, como el de la
impresora, grita en mi cabeza “¡Atasco, atasco!”.
Quizás estaría bien dejar
de competir conmigo misma, reconociendo con honestidad que hay días
en los que no, no, no hay manera de que se me ocurra algo decente que
publicar.
Quizás podría recordar lo
buena estudiante que siempre fui. Las pocas ocasiones en las que me
tuve que obligar a permanecer sentada en el escritorio hasta que me
supiera la lección de pe a pa, porque, francamente, queridos, eso
nunca me costó demasiado.
Quizás necesito que me
lleven a un taller. O que alguien prenda, en los bornes de mi
corazoncito oxidado, esas pinzas que se utilizan para arrancar una
batería maltrecha con la ayuda inestimable de un motor en marcha
Quizás, ponerme a bailar,
grabar vídeos idiotas, hacerme fotos desnuda, escribirle deshonestas
cartas de amor a Mr. Cave o Mr. Fassbender.
Quizás podría hacer una
tarta de queso tan untuosa que hubiera de ser mascada como chicle.
Quizás, ir a una papelería.
Comprar un rollo de papel continuo de dos metros de altura. Comprar
botellitas de lustrazapatos Kanfort de varios colores. Fabricar una
pancarta en la que se lea, en letras grandes como la torre Eiffel, el
siguiente mensaje: “ERES INSIGNIFICANTE. ERES LIBRE”. Colgarla en
la pared vacía que hay frente a mi cama.
Quizás, inventarme una
ciudad y poblarla de personajes. Quizás elegir al azar una de las
Ciudades invisibles de Italo Calvino, y vivir medio mes en
ella.
Quizás explicar que, cuando
miro esta foto, me doy el lujo de fantasear con que la figura
desenfocada del fondo soy yo. Descontando el hecho obvio de que
tendría que nadarme el Océano Pacífico, desde Hawaii hasta
Acapulco, para echar una espalda semejante.
Quizás vagabundear por la
Wikipedia, y escribir páginas obsesas y fulgurantes sobre cualquier
tema. Los proverbios flamencos de Brueghel el Viejo. O el
volcán Parinacota. Qué idea.
Quizás reservar una casa
rural en Villaluenga del Rosario, y tirarme un fin de semana entero
escribiendo, andando, escribiendo, andando, y sobreviviendo a base de
pan moreno de Tarifa y queso payoyo. Sustituir casa rural por tienda
de campaña. Sustituir Villaluenga por La Sauceda. Sustituir
“andando” por “defendiendo mi coto de setas frente a hordas de
gaditanos de una sola ceja” por "materializando un tórrido romance semi-adúltero con Ese Lector Desconocido Que Me Ama ".
Quizás podría concederme
permiso para ser indulgente.
Quizás, mañana.
Te ordeno que seas (auto)indulgente.
ResponderEliminarHeil
EliminarDe vez en cuando hay que parar un ratito y disfrutar del descanso ¿no?
ResponderEliminarDe vez en cuando también hay que descansar de tanto descansar!
EliminarTú en esa cocina,te ahogarías!,pero hija si no me dejas tener dos trastos juntos en la encimera sin que te pongas a recogerlos.
ResponderEliminarPero seguro que el fregadero no está lleno de cáscaras de huevo y latas de atún, y estropajos llenos de mijillas.
EliminarUn consejo.Date un descanso,físico y mental.Por ejemplo,para mañana no hagas ningún plan,pero ninguno.Levántate y a partir de ahí haz solamente lo que te apetezca.Será posible?,cuentanoslo.
ResponderEliminarQueridita, mañana a) tengo que sacar montañas de ropa de invierno de debajo de la cama; y b) tengo que ponerme el disfraz forestal para irme a trabajar. No será posible, no, lo que me planteas.
EliminarSi el atasco lo materializas en post "asín", pues oye, que están muy bien aprovechados.
ResponderEliminarQue levante la mano el que no se atasque!...(y no hago más que escribir esto y sentir al Daddy Yanky o algunos de estos cantantes de éxitos veraniegos amenizando en una playa de Benidorm).
Muases!
Laura
Coreografía surcoreana ya!! Boh boh boh boh.
EliminarUn beso, bonita